Tenemos la tendencia de fotografiar edificios, lugares, paisajes,… de forma aislada, dando al observador la sensación de que son independientes del entorno y de su historia.
Un caso paradigmático es Tamajón. Abundan las fotografías de la laguna de Cantarranas, de la iglesia y del convento franciscano desde todas las perspectivas posibles, que expresan su valor pero que no los integran con la villa.
La historia de Tamajón y de sus gentes no sería la misma sin ellos. La importancia de estos monumentos, naturales ó no, se la han dado los vecinos del pueblo a lo largo de los siglos. ¡Y quería decirlo!
Lar-ami
Pues claro que si, la gente de Tamajon son buena gente, incluyendo mis antepasados. Que Viva Tamajon!..y Ole!
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Celebro que en esto también estemos de acuerdo!!!
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El día día hace mucho en el territorio.
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Los habitantes permanentes son los que mantiene el pueblo.
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